domingo, 7 de octubre de 2007

Declaración Universal de los Derechos del Gato*

PREÁMBULO
Considerando que personas, animales y naturaleza pueden y deben vivir en armonía.
Considerando que todos tienen sus propios derechos.
Considerando que los derechos de cada uno deben implicar el respeto por los derechos de los demás.
Considerando que los gatos han cedido generosamente su capacidad de subsistir por sus propios medios
para convivir con los seres humanos y facilitar la civilización.
Considerando que la humanidad tiene una deuda imborrable hacia los animales y la naturaleza.
Considerando que los gatos tienen derecho a tener un techo y una familia que cubra sus necesidades física y afectivas.
Considerando que el reconocimiento por parte de la especie humana del derecho a la existencia de las demás
especies animales constituye el fundamento de la coexistencia de les especies en el mundo.
Considerando que el respeto del ser humano por los animales está unido al respeto del ser humano por el ser humano.
Considerando que la educación implica enseñar, desde la infancia, a observar, comprender,
respetar y amar a los animales, y la reverencia por la vida.
Considerando que amar a los animales nos hace más humanos.



PROCLAMAMOS LO SIGUIENTE:

Artículo 1º Ningún gato puede sobrevivir sin ayuda. Abandonar
un gato es una acción cruel y degradante.

Articulo 2º El gato es un ser vivo y tiene derecho a una existencia
digna y a un lugar en la sociedad.

Artículo 3º Aunque parezca un ser solitario, el gato necesita recibir
y dar afecto, un techo y protección.

Artículo 4º El gato necesita un propietario. Calor en el invierno
y un espacio fresco en verano. Necesita buenos alimentos, una
cama limpia y agua fresca cada día.

Artículo 5º Los gatos tienen un comportamiento propio, diferente
del de los seres humanos. Sólo quien está dispuesto a
conocerlos, sin asignarles comportamientos humanos, tiene
derecho a tenerlos.

Artículo 6º El gato tiene derecho a vivir con sus propietarios y
a crecer al ritmo y en las condiciones de vida y de libertad propias
de su especie.

a) El gato tiene derecho a ser respetado.

b) El gato tiene derecho a vivir con la madre y a ser criado por
ella un mínimo de seis semanas y de aprender a jugar y convivir
con seres humanos. Si no respetamos este derecho lo
convertimos en un pobre callejero casi imposible de adaptar.

c) El gato tiene derecho a aprender, y puede aprender hasta el
último día de su vida. Sólo quien está dispuesto a educarlo,
con paciencia, tiene derecho a tenerlo.

d) El gato tiene derecho a ser aceptado e integrado. Sólo quien
puede garantizar su bienestar tiene derecho a tenerlo.

e) El gato tiene derecho a una buena alimentación, una buena
salud, una buena educación y una buena higiene.

f) El gato puede reproducirse. Sólo quien está dispuesto a planificar
humanitariamente su reproducción o bien la esterilización
tiene derecho a tenerlo.

g) El gato tiene derecho a moverse con libertad y a afilar sus
uñas. El propietario debería reservarle un espacio y algún
tronco de árbol para su uso.

h) El gato tiene capacidad para jugar y compartir. Sólo quien
está dispuesto a disfrutar de su compañía tiene derecho a
tenerlo.

Artículo 7º
a) El gato tiene derecho a que su vida sea conforme a su longevidad
natural. El propietario ha de acompañarle amorosamente
hasta su final.

b) Si la eutanasia de un gato es aconsejable por causa de una
enfermedad dolorosa incurable, debe realizarse con la compañía
del propietario, con la intervención del veterinario, después
de dormirlo y ha de ser instantánea e indolora.

c) El cuerpo de un gato muerto debe ser tratado con respeto.
Cualquier acto que implique la muerte innecesaria de un animal
es un biocidio, es decir, un crimen contra la vida.

Artículo 8º Ningún gato puede ser dedicado a controlar la población
de ratas de las ciudades. Es un objetivo irreal y que
puede poner en peligro su vida.

Artículo 9º Ningún gato puede ser explotado para esparcimiento
humano. Las escenas violentas con gatos maltratados han
de ser prohibidas en el cine y en la televisión, a no ser que su
objetivo sea denunciar los atentados contra los derechos de
los animales.

Artículo 10º
a) Los organismos de protección y salvaguarda de los gatos deben
ser representados a nivel gubernamental.

b) Los derechos del gato deben ser defendidos por la Ley, al
igual que los derechos del hombre.

Texto propuesto por la Fundación Affinity, siguiendo el texto definitivo de la Declaración Universal de los Derechos del Animal, adoptado por la Liga
Internacional de los Derechos del Animal y por las Ligas Nacionales afiliadas tras la 3ª Reunión sobre los Derechos del Animal, Londres, 21 al
23 de setiembre de 1977. La declaración proclamada el 15 de octubre de 1978 por la Liga Internacional, las Ligas Nacionales y las personas físicas
asociadas a ellas, fue aprobada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y, posteriormente,
por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
* © Fundación Affinity
WWW.FUNDACION-AFFINITY.ORG Amar a los animales nos hace más humanos