domingo, 17 de junio de 2007

Protegiendo a los gatos cuando hace calor


A diferencia del ser humano, cuya transpiración lo mantiene fresco, las mascotas casi no cuentan con glándulas sudoríparas. Sí sudan entre los dedos, pero no es suficiente para liberar el calor; lo que hacen es jadear para disiparlo pero esto no es muy eficiente.
Para ayudar a su mascota a resistir el calor se recomienda:

Proporcionarles varios tazones de agua que se mantengan llenos todo el día; también podría colocarse uno de ellos bajo una llave de agua que gotee. La idea es evitar que se quede sin agua por haberla botado accidentalmente o se la haya bebido toda.

Debido a que el calor solar eleva rápidamente la temperatura del cuerpo, las mascotas necesitan lugares frescos a donde acudir para esconderse del sol; podría ser un pórtico, una sombrilla o hasta un árbol frondoso. Revise la casa y no de por hecho que su mascota tiene un lugar agradable para escapar del calor, ya que en cualquier parte, en el momento más caluroso del día la temperatura podría elevarse significativamente.

El sol puede quemar la nariz y orejas de su mascota; sería conveniente aplicarles por lo menos una vez al día un protector solar; los hay no tóxicos, pero debe tenerse cuidado de que no contengan zinc.

Realice las caminatas con su mascota en las primeras horas de la mañana, o por las noches, cuando la temperatura suele estar más fresca.

Si tiene que salir en auto con su mascota, ubíquelo junto a la ventana de manera que reciba la brisa y asegúrese de abrirla sólo lo necesario para evitar un salto mortal. Si el paseo va a ser largo, lleve consigo un tazón y agua para refrescarlo.

Nunca deje a su mascota encerrada dentro de un auto estacionado; pero si tuviera que hacerlo, estacione en un sitio sombreado y abra un par de ventanillas para que circule el aire.

Si suele jugar con su mascota, en los días calurosos no la agote, las mascotas no siempre conocen sus límites.

No es indispensable cortarles el pelo, ya que éste en muchos casos mantiene a la mascota aislada y más fresca.

Si su mascota es un perro, permítale una fresca zambullida en una piscina de poca profundidad.




Fuente: Guía Médica de Remedios Caseros para Perros y Gatos
Peter Mayle

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