Robokoneko
(Un cibergato con 40 millones de "neuronas")
Nuestro propio cerebro es un maravilloso modelo a emular conformado por redes de “algoritmos genéticos” que estrujan símbolos, entregando como respuestas soluciones a problemas. Estas redes son empleadas para crear prótesis e incluso miembros que se adaptan a los músculos humanos y para el desarrollo de robots: comenzando por “gatos electrónicos.
Robokoneko es un robot japonés al cual se le va a conectar el cerebro artificial más ambicioso desarrollado hasta el momento, en construcción por Genobyte, un laboratorio de Boulder, Colorado. Este cerebro fue ideado por Hugo de Garis. Pero Robokoneko no pretende ser exactamente una réplica mecánica de un felino. Con sus cuatro patas -y su casco protector- será capaz de dar saltos y de subir y bajar escaleras, aunque su principal habilidad tal vez sea la que le permite interpretar el lenguaje humano o para realizar por sí mismo tareas que escapan al común de los mininos (como conectar el lavavajillas, sin ir más lejos).
Es una mascota robótica diseñada por Philips hace ya un par de años. Tiene cara de emoticono y cuerpo de gato. No es muy gustoso de acariciar, pero es mejor conversador que los felinos convencionales.
Es capaz de entender lo que le cuentes y responderte, además de complementar el diálogo con expresiones, digamos faciales, diversas, que si no son muy comunicativas, al menos curiosas sí lo son. Sensores en los pies y luces LED en las orejas completan el cuadro de posibilidades de interacción.
En julio de 2006 tuvo lugar en Tokio la “Tokyo Toy Show”, donde se realizaron muestras de lo último en juguetes para chicos. En este caso, un sucesor del famoso perrito robot llamado Furby, el Gato-Robot que reacciona a los gestos que hagamos dependiendo de la forma en que lo toquemos…